Campeones, remedio para los nervios y Dora revisando su equipaje

Por fin nos hemos sacudido los complejos, por fin dijimos ¡podemos! y pudimos, por fin estamos donde nos merecemos.Una tarde noche de infarto, un equipo que jugo a romper piernas y pechos, que intentó suplir su inferioridad con patadas y falta de deportividad, un arbitro que como dice mi compañera seguro que era de Gibraltar, y enfrente un equipo con ganas de jugar, todos a una, con ganas de demostrar que la deportividad es hacer bien las cosas y por fin CAMPEONES DEL MUNDO como si nada.


Durante el partido para evitar comerme las uñas o que las taquicardias me pudiesen me puse al día con el Dear Janne, que pronto regresará Georgina y no quiero que me pille con los deberes sin hacer, además corté piezas para otra cosita que me llevaré de vacaciones y mientras comiendo canapés de torta del casal y de paté mientras miraba de reojo la pantalla.La prorroga no pudimos más y nos fuimos a verla a un bar donde la emoción era impresionante. Y por fin llegó el Goooooooooool que nos daba la victoria, campeones del mundo, abrazos con gente que no conocía, intentando llamar a mi hijo y como en noche vieja no era posible por estar las líneas ocupadas. Risas, saltos, felicidad.Ayer ganó el mejor equipo, pero sobre todo ganó una afición y un país que como una piña sacó sus banderas a la calle, no tuvo complejos a la hora de vestirse con los colores rojo y oro, y gritó su orgullo por ser español. Felicidades a los que ayer nos hicieron sentir que podíamos y pudimos.
Además no quiero dejar de enseñaros los últimos preparativos de Dora antes de sus vacaciones revisando su equipaje y con su cartilla metidita en su preciosa funda con su nombre.